El ayuno según Hildegarda de Bingen

La benedictina y erudita Hildegarda de Bingen dedicó su vida al estudio de muchos temas diferentes, entre ellos, diversas escrituras sobre remedios naturales medicinales y la descripción del efecto de las especias en nuestro cuerpo.

Los eruditos se llevan dedicando al ayuno terapéutico desde la Antigüedad. Ya Hipócrates recomendaba en la Antigua Grecia el ayuno para sacar su "médico interior" a relucir.

El ayuno terapéutico según Hildegarda de Bingen no tiene nada que ver con un régimen, ni con perder peso. La idea básicamente era evitar las comidas pesadas durante un periodo determinado de tiempo. Este es un ayuno recomendado para aquellas personas que no se sienten del todo sanas, pero que tampoco están enfermas, y que quieren gozar de mejor salud.

Con la digestión diaria de los alimentos, el cuerpo gasta mucha energía. Si se ayuna, esta energía está disponible en nuestro cuerpo para otras actividades, por lo que es un proceso desintoxicante y de autocuración. El metabolismo se reactiva, el cuerpo tiene más energía e incluso se pueden atenuar las enfermedades crónicas. Además, el ayuno también sirve para la claridad mental.

Para poder beneficiarse realmente del ayuno y sacarle el máximo provecho, debe de hacerse correctamente.

Normalmente, el ayuno terapéutico dura unos 12 días. Se debe preparar el cuerpo para ello, teniendo dos días de descarga por semana, donde dos días a la semana se debe seguir el menú preestablecido de la dieta. Dos días antes del verdadero ayuno, se debe intentar prepararse mentalmente para el tratamiento y beber de dos a tres litros de té de hinojo o té para el ayuno.

El ayuno

El menú del ayuno debe de ser el siguiente:

En el desayuno, comer una porción de harina de espelta cocida con frutas secas y especias energizantes como manzanilla española (Anacyclus pyrethrum), galanga, canela o ispaghul (Plantago ovata).

Al mediodía, una sopa de ayuno, de dos a tres platos. Se trata de una sopa de plantas con ricos ingredientes como sémola de espelta, las especias y las verduras adecuadas. A media tarde se puede tomar una manzana y las galletas de especias de Hildegard.

En la cena, tomar de dos a tres platos de sopa de ayuno y hasta 4 galletas de Hildegard.

Como bebida a lo largo del día, té de hinojo o té de ayuno (2-3 litros).

Es muy importante la actividad física, como por ejemplo caminar. Tampoco nos olvidemos de la importancia del descanso.

¿Qué especias sirven para el ayuno terapéutico?

Estas son algunas de las especias que Hildegarda de Bingen recomienda para el ayuno:

  • La manzanilla española es una planta nativa de la región mediterránea. Favorece tanto a personas sanas como enfermas, mejora la digestión y es buena para los problemas de estómago.
  • El jengibre: la especia más versátil de todas. Con un gran porcentaje de aceites esenciales, estimula la digestión y el metabolismo.
  • La galanga es conocida como "el jengibre suave". Hildegarda de Bingen lo utilizaba, por ejemplo, para enfermedades respiratorias y fiebre.
  • La canela activa el metabolismo y con vino caliente puede ayudar a calmar los dolores de gota.
  • Los clavos de olor sirven para el dolor de cabeza. El vivo aroma de esta especia aclara la mente y ayuda a acabar con el agotamiento psíquico.

Galletas de especias de Hildegarda de Bingen

Necesitamos:

  • 400 g harina de espelta
  • 250 g margarina
  • 150 g azúcar moreno
  • 200 g almendra molida
  • 2 huevos
  • 20 g nuez moscada
  • 20 g canela en polvo
  • 10 g clavo en polvo
  • 1 pizca de sal
  • 1 poco de agua

Mezcla los ingredientes y amasa hasta obtener una masa quebrada uniforme. Forma dos rollos con la masa y déjalos enfriar. Posteriormente, corta los rollos en rodajas y colócalos sobre la bandeja del horno. Hornear a 180 ºC durante 15-20 minutos.

Consejo: no comer más de 6 galletas al día.